Este lunes el Govern catalán y el Gobierno español se encuentran en Madrid en la Comisión Bilateral. Este encuentro, fijada en el Estatuto de 2007, hace tres años que no se produce. Sobre la mesa, hay traspasos pendientes y otras cuestiones técnicas entre el Estado y la Generalitat. El Govern ha listado 56 traspasos pendientes. Algunos llevan décadas aparcados en un cajón. Un cajón de sastre porque son muchos y diversos.
La Generalitat reclama el traspaso de los MIR, la gestión del litoral y las políticas activas de empleo, entre otros servicios de la Seguridad Social. También espera obtener la competencia de becas, créditos y otras ayudas para universitarios y estudios diversos. Este es probablemente uno de los temas más maduros y con más posibilidades de salir con un calendario para el traspaso efectivo. Hay otros temas más conflictivos, como el ingreso mínimo vital.
Además de los traspasos, el Govern reclama algunas transferencias. Competencias que no son propias de la Generalitat pero que querrían tener. La más importante, porque viene de lejos y porque cuenta con un gran apoyo, es la gestión del aeropuerto del Prat.
Y todavía hay un tercera carpeta, la de los incumplimientos. La financiación de la ley de dependencia. La disposición adicional tercera. Mossos, Cercanías… Pero también incluye la ley del audiovisual que prepara el gobierno español. El anteproyecto sólo prevé cuotas para proteger el castellano delante del inglés en las grandes plataformas. El gobierno reclamará una cuota para el catalán.
En la bilateral, el gobierno quiere tratar la gestión de los fondos europeos, que no figura en el orden del día. El debate sobre la autodeterminación y la amnistía se hará en septiembre en la mesa de diálogo. La comisión bilateral se ha reunido pocas veces desde que se estrenó. Figura en el Estatut de Autonomía y arrancó en 2007. En teoría se reunirá un mínimo de dos veces al año, pero ahora hacía tres que no se hacía.
Y antes, del 2011 al 2018, los años de Mariano Rajoy en el Gobierno, no se reunió ninguna vez. Con Pedro Sánchez al gobierno español, una sola vez. Sólo se cumplió entre 2007 y 2009. Se está pendiente de esta reunión porque de ella se esperan puntos que siempre se han prometido, pero jamás se han cumplido desde el Gobierno español.
