El Tribunal Popular Intermedio de Dandong ha condenado a 11 años de prisión al responsable de la embajada de Canadá en Pekín, Jim Nickel. Los cargos se fundamentan, según la acusación, en «proveer ilegalmente secretos de Estado e información de inteligencia a fuerzas extranjeras».
El diplomático fue detenido de manera arbitraria el 10 de diciembre de 2018 y ha sido mantenido bajo custodia desde entonces. Esta detención se produjo inmediatamente después de que en Canadá se arrestase, en diciembre de 2018 a la hija del fundador de Huawei, la directora financiera de la empresa, Wanzhou.
Washington solicitó a Canadá su extradición tras acusarla de fraude bancario. Todavía está pendiente celebrar el juicio sobre esta cuestión y mientras, se encuentra en libertad condicional.
Además de la condena de prisión, se le confiscarán bienes por valor de 50.000 yuanes, que equivalen a unos 6.500 euros.
La respuesta por parte de Canadá ha sido contundente: el primer ministro, Justin Trudeau, ha calificado de «inaceptable e injusta» la condena.
Respaldo internacional
Los embajadores de los distintos países presentes en China se han reunido en la embajada canadiense en China como muestra de apoyo y solidaridad con el condenado. Además, se han desplazado hasta el lugar donde se encuentra detenido, diplomáticos de Alemania y de Estados Unidos.