El presidente Carles Puigdemont ha mostrado su sentido crítico hacia un problema transversal en la Unión Europea. El presidente de Junts per Catalunya ha comentado el caso Pegasus: un desastre para democracia que ha afectado al Gobierno alemán, y que también podría comprometer otros países de la Unión Europea.
En concreto, citó un tuit del investigador John Scott-Railton, que según explica en su perfil tiene la misión de «perseguir el mal en las infraestructuras digitales». Este investigador de la Universidad de Toronto ha publicado un hilo en el que muestra un abuso de poder que se produjo cuando la Policía Federal Alemana que, secretamente, ha comprado el software Pegasus.
Hay que decir que, como afirma el ministro de Interior alemán, Horst Seehofer, y la Comisión Federal de Protección de la Información, este hecho ha sucedido sin que tuvieran conocimiento. Por lo tanto, muestra que o bien el Gobierno alemán no está siendo suficientemente sincero con la opinión pública, o bien que la Policía Federal actuó a espaldas del Gobierno, por lo tanto con unos objetivos que no están alineados con la agenda de el ejecutivo alemán.
Esta aplicación es un programa de espionaje «israelí», desarrollado por el grupo NSO, de quien es difícil conocer más detalles, y que permite obtener información crítica procedente de los dispositivos electrónicos. El programa está reservado para «el uso de gobiernos», por lo que es bastante complejo saber qué limitaciones tiene, ya que los ejecutivos que hacen uso han sido muy opacos al respecto.
La oposición alemana ya ha puesto en duda que el Gobierno alemán esté haciendo un uso legítimo del software, ya que la Policía no comunicó ni la compra, ni que se empezaría a usar esta aplicación, «por razones de seguridad nacional», como han argumentado los policías posteriormente. Varios diputados han pedido al Gobierno que se abstenga de usar Pegasus con intereses partidistas, evidenciando que tampoco han respondido sobre qué otras autoridades podían estar haciendo uso del programa de espionaje.
Puigdemont, ha valorado este hilo y ha explicado que «son las cosas que amenazan el modelo de vino (d) a europeo» y puntualizó que «no es por ninguna intromisión de ningún país tercero en los asuntos de la Unión Europea» en una afirmación un poco ambigua. El 130º presidente de la Generalitat ha subrayado que «son los Estados miembros que a través de sus rincones oscuros van erosionando cada día el estado de derecho» y lo ha condenado contundentemente. «El caso Pegasus es un escándalo gravísimo» ha concluido Puigdemont.
Cabe decir que una filtración masiva de Pegasus puso en conocimiento de la opinión pública que se había hecho un seguimiento a 50.000 políticos, empresarios, diputados y trabajadores de ONG catalanes. Algunas de las personalidades rastreadas fueron: Roger Torrent, Anna Gabriel, Ernest Maragall, Sergi Miquel, Jordi Domingo, y que casualmente son mayoritariamente independentistas.
Aún queda por descubrir, por tanto, qué Estado podría haber contratado este programa espía y qué información tiene, dado que como afirma NSO Group en su web, sólo venden el software a gobiernos y agencias del gobierno: «para ayudar a prevenir e investigar el crimen y el terrorismo para salvar cientos de vidas alrededor del planeta «.