Francesco Arcuri, exmarido de Juana Rivas, ha interpuesto una demanda civil contra la ministra de Igualdad, Irene Montero y contra el líder de Más Madrid, Iñigo Errejón por haber atacado, presuntamente, contra su honor.
La demanda, que de momento está en fase de conciliación previa, se centra en las manifestaciones públicas realizadas por Montero y Errejón, donde se posicionaban en favor de la exmujer del italiano, que finalmente fue condenada por secuestro de sus hijos.
La justicia italiana ha dado la custodia a Arcuri, considerando incluso que Juana Rivas podría no ser positiva para sus hijos.
En el proceso de conciliación se pide a Montero y a Errejón que se retracten de las manifestaciones públicas hechas contra Arcuri y que abonen en concepto de daños y perjuicios 80000 euros por parte de Montero y 60.000 por parte de Errejón.
Arcuri asegura que esas cantidades serán destinadas a asociaciones de protección del menor.
En las declaraciones aportadas de Irene Montero no se hace referencia en ningún caso al señor Arcuri, sino que se apoya a Juana Rivas. En las declaraciones en el Congreso de Errejón sí se refiere a Arcuri como maltratador, hecho que fue reconocido por el propio Supremo respecto a un episodio de malos tratos producido en 2009, aunque «no se ha acreditado otro posterior». Fue precisamente condenado a tres meses de prisión por malos tratos a su entonces mujer.