La Policía Judicial portuguesa ha puesto en marcha hoy más de cien órdenes de búsqueda y captura contra una decena de militares y otros miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad portuguesa por su presunta implicación en una red de tráfico de drogas, oro y diamantes que habría sido llevado a cabo haciendo uso de aviones militares, aprovechando su participación en las misiones desarrolladas con Naciones Unidas.
Se han llevado a cabo hoy registros en Lisboa, Oporto, Bragança y Vila Real. El más destacado ha tenido lugar en el cuartel militar de Comando, en la freguesia de Carregueira.
Tal y como apuntan fuentes de la investigación, estos militares y miembros de las fuerzas de los cuerpos de seguridad de Portugal, habrían aprovechado las misiones desarrolladas por Naciones Unidas en República Centroafricana para dedicarse a transportar drogas, oro y diamantes en los propios aviones militares, con destino a Europa.
Según detallan, en el caso de los diamantes, una vez llegados a suelo portugués, habrían sido transportados a territorio belga, como Bruselas o Amberes, donde el mercado del diamante es muy popular.
El dinero obtenido del tráfico de estos materiales habría sido invertido después en bitcoins.