Un joven que realizaba graffitis en el metro de Barcelona, entre otros lugares, ha sido condenado a pagar 1.786 euros en concepto de indemnización al Metro de Barcelona, y a no poder acceder al suburbano durante un año.
La condena deriva de la denuncia interpuesta por haber pintado dos vagones del metro, el pasado 10 de agosto de 2020. Fue entonces cuando el acusado y otros tres jóvenes no identificados accedieron a la estación de metro de la plaza del Centre, en la línea 3, y pintaron dos vagones de metro cuando estaban parados en la estación, según recogen los hechos probados de la sentencia.
El juez considera probado que hubo propósito claro de menoscabar el patrimonio ajeno y que con la pintura dañaron corrosión en las gomas de las ventanas y puertas del convoy. Se solicitaban dos años de prisión, pero finalmente se ha podido llegar a un acuerdo. Se ha valorado también la circunstancia atenuante de alteración psíquica del acusado para determinar la condena.
Desde el Metro de Barcelona consideran que esta condena tiene un claro valor por la ejemplaridad que supondrá para otras personas que vienen realizando este tipo de prácticas. Un problema, que según señalan, sigue vivo y que hay que combatirlo desde todos los ámbitos posibles.
Durante el año pasado se registraron 703 intrusiones de vándalos grafiteros dañando a 79 vagones que estaban en uso.