La guerra de los datos está sobre la mesa para intentar defender posicionamientos sobre la gestión de la pandemia y las medidas que se tratan de imponer.
El cambio en los criterios para presentarnos los datos por parte del Ministerio de Sanidad ha sido uno de los hechos que han generado debate desde el comienzo de la pandemia.
Ya en junio de 2020 podíamos leer noticias como esta donde se anunciaban los cambios en los informes diarios de Sanidad. A partir del 25 de mayo de 2020 el Ministerio de Sanidad cambió la forma de informar sobre los datos de la pandemia por la Covid-19 en España. Hasta ese día, según recoge RTVE, el organismo, tras recibir las notificaciones de las distintas comunidades autónomas, remitía por un lado un dato acumulado de las distintas regiones y por otro, la diferencia registrada con respecto al día anterior. Ese mecanismo funcionaba para tres parámetros: casos totales, fallecidos y recuperados (Infecciones resueltas).
Pero esa no fue la primera modificación, pues el 26 de abril, recién comenzada la pandemia hubo otro cambio: Sanidad estimó oportuno proporcionar únicamente los diagnósticos confirmados por la prueba PCR o reacción en cadena de la polimerasa, cuando en períodos previos daba por buenos los resultados de éstas y los test serológicos, según señala RTVE. Fue por ello «que el país vio cómo su número de contagios se veía bruscamente mermado de un día para otro, siendo 20.000 menos, aunque desde el Ministerio afirmaban que esta serie de cambios eran habituales también en otros territorios».
Los cambios introducidos mediante el BOE del 11 de mayo de 2020 suponían una ruptura de la serie histórica que, según señalaban, estaba siendo «difícil de seguir» por las discrepancias entre los datos de las comunidades autónomas y del Gobierno central. Señala la noticia que esta discrepancia fue notable en los datos de Cataluña del 17 de abril, cuando comenzó a facilitar también los casos sospechosos y fallecidos con sintomatología, lo que hacía aumentar notablemente las cifras estatales.
Los cambios, según reseñaba ABC, se habían producido en un total de siete veces: «la falta de previsión y las irregularidades en la recogida de datos» se consideraban entonces los grandes problemas que propiciaban los desajustes en los informes del Ministerio.
Recientemente hemos ido viendo cómo los datos sobre los que se centra la información tienen más que ver con los casos positivos que con los fallecimientos, suponiendo poner el foco en unas cifras que demuestran la evolución de la pandemia.
Fin de las restricciones generales entre países a partir de hoy
La Unión Europea ha renunciado hace dos días, según publicaba El País, al mapa de contagios como guía para la gestión de la pandemia. Se daba así el primer paso para la llamada «gripalización» del sistema de vigilancia. Un avance de lo que sucederá en esta semana para cambiar el modo de gestión de la pandemia, que apunta a la retirada de las medidas restrictivas generalizadas en los Estados Miembro hasta ahora.
Precisamente está previsto que hoy, martes, El Consejo de Ministros de la UE apruebe la supresión del mapa de contagios como guía para el establecimiento de las limitaciones al movimiento entre países, un cambio destinado a facilitar la movilidad y a recuperar cierta normalidad. La imposición de medidas como la aportación de una prueba negativa o las cuarentenas ya no dependerá de la procedencia geográfica del viajero sino del estatus de su certificado Covid, según adelantaba El País el pasado domingo.
Ante la variante Omicron, Bruselas lleva tiempo considerando que las restricciones deben hacerse atendiendo al perfil personal de cada pasajero y no a su lugar de procedencia.
Se supone que hoy se tomará la decisión por parte del Consejo de Ministros de la UE de que «aquellas personas que se hayan vacunado con la pauta completa, que hayan superado la enfermedad o que presenten un test negativo» no podrán ser obligadas a someterse a nuevas pruebas o guardar cuarentena cuando lleguen al país de destino, independientemente del país del que provengan en su viaje. El pasado viernes esta decisión tuvo luz verde de los 27 estados miembro y hoy se tendrá que confirmar en la reunión señalada.
