La lengua castellana no tendrá reconocimiento de lengua vehicular en el sistema educativo de las islas Baleares, según han acordado los partidos que configuran la coalición de gobierno: PSIB-PSOE, Unidas Podemos y MES.
Mediante un comunicado conjunto que han firmado las tres formaciones políticas, han eliminado los artículos que habían sido introducidos para buscar la abstención del Partido Popular en la Ley de Educación. Apuesta ahora por la autonomía de los centros educativos en este ámbito lingüístico.
En un principio se introdujo el castellano como lengua vehicular, respondiendo así al interés de obtener la abstención del Partido Popular en la votación. Además, la Sentencia del Tribunal Supremo que obligó a Cataluña a impartir un 25% de las clases en castellano generó también una prensión en ese sentido.
Mañana martes el Parlament balear llevará a cabo la votación sobre la nueva Ley de Educación, que cuenta con un apartado destinado a las «lenguas oficiales en Baleares», señalando al catalán y al castellano.
Por su parte, desde el Partido Socialista, formación a la que pertenece la presidenta balear, Francina Armengol, se ha comunicado que no participarán en ningún tipo de «instrumentalización» de la lengua catalana, y lamentan que el Partido Popular haya sido quien haya roto «el consenso en cuestiones relacionadas con el consenso lingüístico».
Desde la Federación de organizaciones por la lengua catalana (FOLC), han señalado que esta norma se opone a la redacción de la Ley de normalización lingüística de las islas, aprobada en 1986 por el Parlament balear, donde se contempla que el «catalán debe ser progresivamente la lengua vehicular de la enseñanza».