La infanta Cristina de Borbón, hija de rey emérito Juan Carlos I y hermana del actual jefe de Estado español, Felipe VI, no deja de sorprender a los periodistas que siguen a dicha familia de los Borbones. Según explica Sílvia Taulés en Vanitatis, otra de las fotos que más han llamado la atención en la separación de la infanta e Iñaki Urdangarín, fue cuando la vieron en el aeropuerto aún con el anillo de casada puesto, con una maleta en los pies y cara triste, yendo a ver a su padre para llorarle las penas.
Juan Carlos montó en cólera contra el aún yerno suyo, como ya indicamos aquí. La infanta estuvo en Abu Dhabi del 3 al 6 de febrero y tal como explica Vanitatis «a su llegada dejó a su padre desconcertado». El rey Juan Carlos quedo absolutamente aturdido en la visita que le hizo su hija Cristina, porque en una de las conversaciones que mantuvieron, según el citado medio, «la Infanta argumentó que su marido estaba muy mal, que el paso por prisión le había afectado mucho, unas palabras que el rey emérito interpretó como una suerte de justificación».
Sea como fuere, Juan Carlos le ha explicado a sus íntimos lo que charló con Cristina, «a quienes las ha trasladado el desconcierto que sintió al ver que su hija parecía defender, en cierto modo, a su marido». Él emérito apuesta por el divorcio, hace tiempo que lo piensa. «Es más, volvió a decirle a su hija que debía separarse y en lugar de encontrarse a una mujer con las ideas claras se encontró a una esposa llena de dudas, dolida, sí, pero también confusa. No pudo convencerla de tomar una decisión inmediata , algo que el ex-rey pensaba que estaba más que encaminado».
