El jefe del Govern ha esquivado olímpicamente valorar las palabras del diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Gabriel Rufián, que el martes dijo, sobre los contactos del entorno de Carles Puigdemont con Rusia: «Son señoritos pensando que eran James Bond».
«La función de un presidente es no contribuir al ruido». Así se ha pronunciado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, sobre la polémica por las declaraciones de Rufián, portavoz de ERC en el Congreso,
En un contacto con la prensa desde Stuttgart (Alemania), Aragonès también ha dicho que quiere tener toda la información sobre la causa de la presidenta del Parlament, Laura Borràs, en el TSJC antes de establecer ningún criterio: “No voy a entrar a hacer de juez, no me corresponde. Hay un procedimiento en curso”, ha subrayado.
Para quien quiera vincularnos a Putin. pic.twitter.com/zlC9eCQqsE
— Gabriel Rufián (@gabrielrufian) March 15, 2022
Rufián pide disculpas a Junts
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, pidió ayer miércoles «disculpas» a Junts después de que el martes cargara con dureza contra Carles Puigdemont y su colaborador, Josep Lluís Alay, a los que calificó de «señoritos» que que se reunían con personas del entorno del Kremlin pensando que eran «James Bond».
Rufián se disculpó por la «contundencia» verbal con la que se expresó. Pero no por el fondo, que es lo que más molestó a Junts. A su juicio, está en juego «la credibilidad de todo el movimiento independentista». «Esto debe quedar claro. De ninguna manera nos tenemos que vincular con el Kremlin y menos ahora. Exigía una vehemencia», se justificó.
El conflicto cierra la crisis en falso. En el entorno de Junts salieron en seguida a criticar a Rufián por haberse disculpado a medias, solo por la contundencia de sus palabras, pero no por el fondo, por lo que dijo sobre Puigdemont. Fuentes de Junts, no obstante, «valoraron la rectificación de las formas» para tratar de zanjar de momento el asunto, hasta la siguiente batalla.