Las principales patronales de las empresas de transportes ya avisaron de que podían apoyar el paro indefinido que lleva más de una semana durando. Y después de la maratoniana reunión con el gobierno español de este lunes, que ha acordado bonificaciones por valor de 500 millones de euros, lo han cumplido.
En concreto, han sido tres patronales, Fenadismer, Fetransa y Feintra, las que se han desmarcado de este acuerdo, acusándolo de muy poco concreto, porque no precisa cuánto dinero va a recibir cada transportista. Fenadismer ya sola representa unos 50.000 camiones en toda España, por lo que ya empieza a existir el temor a que se produzcan desabastecimientos en todo el territorio.
Las tres consideran que la falta de concreción de las medidas por parte del gobierno español no permiten de momento reanudar la actividad del transporte de mercancías por carretera hasta que no se detallen las medidas urgentes y efectivas que necesitan a los transportistas para poder salir de la ruina en la que están.
Estas tres patronales lo han dicho en un comunicado conjunto a última hora, después de que por la tarde la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, compareciera para anunciar el acuerdo de los 500 millones. Lo hizo acompañada del presidente del Comité de Transporte por Carretera, la entidad oficial donde está representado el sector, y que se disculpó por los efectos del paro.
¿Qué medidas hay en otros países?
Raquel Sánchez afirmó que las medidas que piensan implantar son similares a las que están adoptando los países del entorno, «Medidas que sigan la estructura de las medidas que se han adoptado en otros países como en Francia, Italia y Portugal. ¿Qué significa esto? Que aplicaremos una bonificación en el precio del gasóleo profesional para que esta medida tenga un impacto real y efectivo y vaya directamente a los transportistas.»
Por su parte Calviño dijo que «la inmensa mayoría del sector del transporte» ha dado el visto bueno al acuerdo, y ha añadido que sí es similar a lo que se está haciendo en Francia, «Estamos planteándonos un modelo similar al que se pondrá en marcha a partir del 1 de abril en Francia, en el que hay una parte de la financiación que viene de los presupuestos públicos y otra parte es una contribución de las mismas empresas petroleras.»
Según Calviño, se descartó bajar impuestos al sector porque, dijo, no sería eficaz, y aseguró que los integrantes del Comité de Transporte han estado de acuerdo. Calviño aprovechó para acusar a las patronales que se han desmarcado del acuerdo de tener «otros intereses» que «no responden a lo que nuestro país necesita en este momento».
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