El gobernador de California, Gavin Newsom, después de pisotear los derechos humanos básicos durante más de dos años, está trabajando en un nuevo proyecto de ley sobre ‘infanticidio’ que legalizaría el asesinato de niños según indican diferentes medios de EEUU, hasta los nueve meses de gestación y en las semanas posteriores al nacimiento. El proyecto de ley ha sido propuesto por el “Consejo del Futuro del Aborto” de Newsom, que hace recomendaciones para “fortalecer y expandir” los abortos en el estado de California.
Este indica que en Baja California AB 2223, una madre estará protegida de cargos civiles y penales por cualquier «acción u omisión» relacionada con su embarazo. Estas acciones incluyen no solo el aborto en cualquier etapa del embarazo, sino también la “muerte perinatal”. La muerte perinatal se define como la muerte de un recién nacido hasta siete días o más.
En la legislación propuesta presentada por la controvertida asambleísta Buffy Wicks (D-Berkeley), el asesinato de niños no nacidos y nacidos sería codificado como un acto legal y anunciado como «derechos reproductivos de la mujer». Desde que asumió el cargo, Gavin Newsom ha buscado expandir el acceso al aborto y hacer de California un “estado santuario” para estos llamados derechos de las mujeres.
El nuevo proyecto de ley protege a cualquier persona que “ayuda o asiste a una persona embarazada en el ejercicio” de estos llamados ‘derechos’. El proyecto de ley también otorga a las madres el nuevo poder de demandar a los departamentos de policía si un oficial arresta a alguien que conspira para matar bebés. Inverosímil pero cierto.
La directora ejecutiva de Life Legal Defense Foundation, Alexandra Snyder, emitió un comunicado condenando el proyecto de ley de infanticidio. “AB 2223 no es solo un proyecto de ley a favor del aborto, sino que elimina todas las sanciones civiles y penales por matar a bebés nacidos vivos bajo cualquier circunstancia.