Un país de la Unión Europea, Polonia, se ha retirado unilateralmente de sus compromisos contractuales para comprar la vacuna contra el coronavirus BioNTech/Pfizer, dijo el martes el ministro de Salud, Adam Niedzielski, citando el exceso de oferta y las tensiones financieras causadas por la afluencia de millones de refugiados que huyen de la guerra en Ucrania.
Hablando en el canal de noticias TVN24, Niedzielski dijo que el gobierno de Varsovia había informado a la Comisión Europea y a los proveedores de vacunas a fines de la semana pasada que estaba invocando una cláusula de fuerza mayor en el contrato de adquisición y se negaría a pagar o recibir la entrega de dosis adicionales.
Niedzielski explicó que la mejora de la situación pandémica significaba que había menos necesidad de vacunas. La crisis de los refugiados ucranianos, mientras tanto, había estirado las finanzas públicas y agregó que el gobierno había tratado de llegar a un compromiso, pidiendo que las entregas fueran escalonadas en el transcurso de 10 años, pero “nos encontramos con una total falta de flexibilidad por parte de los productores”.
Niedzielski admitió que la medida había puesto al gobierno en un conflicto legal con Pfizer, que es el principal proveedor de vacunas contra el coronavirus de la UE en asociación con la alemana BioNTech. Las conversaciones con otras empresas comenzarán pronto, dijo el ministro, y agregó que esperaba que mostraran más flexibilidad.
Se desconoce si hay otros motivos silenciados para esa decisión por parte de Polonia. En cualquier caso la Comisión negoció acuerdos de suministro con los principales fabricantes de vacunas en nombre de los países miembros de la UE y también ha firmado contratos de adquisición conjuntos con Moderna, Johnson and Johnson y AstraZeneca, entre otros.
“Los estados miembros están sujetos a obligaciones contractuales, pero la Comisión comprende la difícil posición en la que se encuentra Polonia”, dijo el portavoz de la Comisión, Stefan De Keersmaecker. Agregó que las autoridades de la UE trabajarán para facilitar las discusiones y encontrar una “solución pragmática”. BioNTech y Pfizer se negaron a comentar el tema y solo dijeron que tenían un acuerdo con la Comisión Europea para suministrar su vacuna Covid-19 a los estados miembros de la UE.
El mes pasado, Polonia fue uno de los 11 países que pidieron a la Comisión que creara un fondo de la UE para compensar los costos de salud de los ucranianos que huyen de la invasión rusa. Polonia ha acogido, con mucho, la mayor cantidad de ucranianos de cualquier país miembro de la UE, y alberga a casi 3 millones de refugiados, de los más de de 5 millones que han salido ya.
El apoyo de Polonia a su vecina Ucrania le ha valido elogios en todo el bloque, pero no ha sido suficiente para desbloquear los fondos de la UE retenidos por preocupaciones sobre el estado de derecho. Según la publicación, Politico, el coste que soporta es ya considerable.
