El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha anunciado este domingo el ridículo e hipócrita ‘paripé’ por la «apertura de un control interno en el CNI, a petición de este mismo organismo», para analizar el presunto espionaje a dirigentes independentistas. Lo que es lo mismo que investigarse a uno mismo.
Durante una rueda de prensa en la Generalitat tras la reunión con la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, Bolaños ha dicho que también debe hacerse «la constitución de manera inmediata de la Comisión de Secretos Oficiales» del Congreso, en la que comparezca la directora del CNI, para exponer información, documentación y las conclusiones de ese control interno.
También ha constatado «plena disposición del CNI para facilitar y colaborar en las actuaciones que iniciará el Defensor del Pueblo» sobre el caso, y además Bolaños no ha descartado desclasificar información si es necesario.
El ministro ha puesto en valor que «todas las fuerzas políticas, sin excepción», estarán representadas en la Comisión, y que eso les dará acceso a información secreta y reservada, con el objetivo de aclarar lo ocurrido. Ha calificado la reunión en la Generalitat de cordial, sincera y correcta, y ha trasladado al Govern la «voluntad inequívoca» del Ejecutivo de trabajar para esclarecer los hechos.
Ha asegurado que el Ejecutivo está comprometido con el Estado de Derecho, con los derechos fundamentales, las libertades individuales y con demostrar que la democracia española defiende los de todos los ciudadanos, «piensen como piensen». Y ha defendido que el Ejecutivo tiene «la conciencia tranquila y nada que ocultar» en relación a los hechos, y no ha respondido si hay posibilidad de dimisiones por este caso de espionaje.
Bolaños ha remarcado que «el Gobierno de España comprende la preocupación e inquietud de las personas que se han visto afectadas por estas informaciones y también de aquellas personas en la sociedad catalana y española que han sentido preocupación» por los afectados.