La policía local de Alicante ha comenzado a aplicar una medida que fue aprobada hace un mes: multas para las personas sin techo que viven en la calle.
Señala El Salto Diario que «apremiados por la llegada de las fiestas y el buen tiempo, y a pesar del amplio rechazo que ha generado entre la ciudadanía, desde el Ayuntamiento de Alicante ya han empezado a sacar a la calle un texto tachado de «ordenanza de la vergüenza» por los colectivos sociales, ya que contempla multas de hasta 3.000 euros a trabajadoras sexuales y a personas sin hogar, supuestamente en aras de la «convivencia cívica».
Desde El Salto informan de que a finales del año 2020 la policía comenzó a desalojar de las calles a personas sin techo alegando que «molestaban a los vecinos» y refiriéndose a la ordenanza que en realidad todavía no había sido aprobada. No fue hasta febrero de 2022 que esta normativa local salió adelante.
Las multas pueden llegar a ser de 3.000 para estas personas que, evidentemente, carecen de posibilidades de hacerlas frente. Además, supone un problema añadido: el hecho de constar en los registros públicos como personas con deudas pendientes por impago conlleva que no puedan solicitar ayudas públicas necesarias para ellos.
Unidas Podemos ha sido el único partido político que se ha posicionado contra esta norma de manera activa y está intentando que decaiga llevándola a los tribunales.