El juez sustituto del Juzgado de Instrucción número 16 de Madrid acaba de informar hoy de la absolución de Iñigo Errejón, al considerar que no hay pruebas sobre los hechos denunciados por un vecino del barrio madrileño de Lavapiés, que le acusaba de haberle agredido físicamente propinándole una patada en plena calle.
El magistrado Fernando Fernández Olmedo estima la petición de la Fiscalía y de la defensa de Errejón, y considera que el líder de Más País debe quedar absuelto al concluir que en el juicio «no ha quedado acreditado que el denunciado propinase una patada al denunciante».
Las versiones que se presentaron ante el tribunal fueron «totalmente contradictorias». Los testigos aportados por el denunciante afirmaban que la agresión se había producido, mientras que los testigos presentados por la defensa de Errejón lo negaban rotundamente. Las imágenes grabadas por las cámaras de los comercios colindantes al lugar de los hechos no han servido tampoco puesto que no se aprecia lo sucedido.
El juez subraya que los informes médicos presentados por el denunciante no reflejan que los daños se hayan producido por una patada, y además, también señala que el denunciante acudió varios días después a ser atendido en urgencias.
Contra el fallo cabe recurso.
