La Comisión Europea calcula que la economía española crecerá un 4% en 2022, lo que supone un recorte de un 1,6% en comparación con la estimación que hizo en febrero y duplica su previsión de repunte de la inflación hasta el 6,3% para el presente ejercicio, frente al 2,8% estimado a principios de año, en las que son las primeras previsiones económicas del ejecutivo comunitario desde el estallido de la guerra.
La actualización de las previsiones económicas del Ejecutivo comunitario apuntan a un rebote del Producto Interior Bruto (PIB) de España del 4% en 2022, lo que situará a la economía española como la cuarta en crecimiento del conjunto de la UE en el presente ejercicio, sólo superada por Irlanda, Malta y Portugal, el Estado miembro que registrará un mayor crecimiento.
Para 2023, Bruselas estima un repunte del PIB de España del 3,4%, hasta un punto porcentual menos de lo previsto a principios de año y el pasado noviembre, lo que retrasará la recuperación de los niveles económicos prepandemia hasta mediados de 2023, según ha señalado en su análisis la Comisión Europea.
La estimación de crecimiento del 4% para 2022 se sitúa 0,3 puntos porcentuales por debajo de las previsiones de crecimiento presentadas por el Gobierno español hace dos semanas y en línea con las estimaciones de 2023, que el Ejecutivo español cifró en un 3,5% para 2023. Los niveles de crecimiento estimados para la economía española se sitúan sorprendentemente por encima de la media comunitaria y de la eurozona, cifrada en ambos casos en el 2,7% para 2022 y el 2,3% para 2023.
La Comisión Europea ha destacado que el turismo ha sido el motor de la economía española desde el verano de 2021 y que el crecimiento económico se acelerará a partir del tercer trimestre del 2022, gracias a las inversiones en el marco del Plan de Recuperación y a la recuperación del consumo, que a su vez se verá aupado por la recuperación del mercado de trabajo y los niveles de ahorro derivados de la pandemia.