Un estudio revisado por pares, titulado «Correlación entre el cumplimiento de la máscara y los resultados de COVID-19 en Europa», firmado por Beny Spira, profesor asociado de la Universidad de Sao Paulo,apunta a que las mascarillas no habrían supuesto diferencias notables ante los contagios.
Concretamente, «se analizaron y cruzaron datos de 35 países europeos sobre morbilidad, mortalidad y uso de mascarillas durante un período de seis meses». El estudio abarcó un total de 602 millones de personas.
«Los hallazgos presentados en este breve comunicado sugieren que los países con altos niveles de cumplimiento de las mascarillas no obtuvieron mejores resultados que aquellos con un bajo uso de mascarillas en el mismo periodo de seis meses que abarcó la segunda ola europea de COVID-19», ha resumido el autor del estudio.
«La falta de correlaciones negativas entre el uso de mascarillas y los casos y muertes de COVID-19 sugiere que el uso generalizado de mascarillas en un momento en que más se necesitaba una intervención eficaz, es decir, durante el fuerte pico de otoño-invierno de 2020-2021 no pudo reducir la transmisión de COVID-19″.
Según recoge The National Impulse, más allá de no encontrar ningún beneficio en el cumplimiento del mandato de las mascarillas para reducir la propagación del COVID-19, el estudio halló una «correlación positiva moderada» entre el uso de la mascarilla y las muertes por COVID-19.
«Además, la correlación positiva moderada entre el uso de mascarillas y las muertes en Europa Occidental también sugiere que el uso universal de mascarillas puede haber tenido consecuencias dañinas no deseadas».
El autor del estudio señala que «la correlación positiva entre el uso de la mascarilla y los casos no ha sido estadísticamente significativa (rho=0,136, p=0,436), mientras que la correlación entre el uso de mascarillas y las muertes fué positiva y significativa (rho=0,351, p=0,039). La correlación de Spira entre máscaras y muertes fue considerablemente mayor en los países de Europa occidental en comparación con los del Este: 0,627 (p=0,0007) y 0,164 (p=0,514), respectivamente».
El autor del estudio explica cómo los factores de confusión que podrían haber influido potencialmente en el estudio (tasas de vacunación o niveles previos de COVID-19) fueron irrelevantes para los resultados.