El Ministerio de Defensa ha cesado al capitán del Ejército de Tierra que llevó su unidad a una misa del Valle de los Caídos. La misa fue el martes, y la unidad, encuadrada en la Brigada de Infantería «Guadarrama XII», asistió para que su banderín fuera bendecido en la basílica. Un sacerdote fue el encargado de rociarlo con agua ‘bendita’.
Una vez difundida la noticia, el Ejército de Tierra abrió una investigación, dado que se trataba de una actividad no autorizada llevada a cabo durante una marcha programada. Este expediente debe resolverse en 48 horas, si bien el cese del capitán ya se ha hecho efectivo.
En un vídeo colgado en redes sociales por la asociación Ciudadanos de Uniforme se pueden ver a los miembros de la unidad arrodillados ante el religioso llevando el banderín. Los hechos han recibido numerosas críticas de algunos de los partidos de la oposición en el Congreso y también de Unidas Podemos.
Según la asociación que ha difundido el vídeo, el capitán anuló todos los permisos concedidos a los miembros de la compañía, aunque no tendría permiso para conceder o denegar. Lamentan que no era la primera vez que el capitán en cuestión atentaba contra la libertad religiosa de los militares a su cargo.
Vídeo:
Militares españoles recibiendo bendiciones en el mausoleo fascista del Valle de los Caídos.
El responsable es el capitán de la compañía de MAPO del BIP Uad Ras II/31.
Luego, que si se les relaciona con la extrema derecha y tal. pic.twitter.com/h6aMBUmc9Q
— Miquel Ramos (@Miquel_R) June 1, 2022
El ejército y la iglesia católica
Este caso ha coincidido en el tiempo con el posicionamiento del Ministerio de Defensa respecto a la participación de militares en actos religiosos: considera que forma parte de la «política cultural» del ejército:
«La participación de personal militar en este tipo de actos se considera parte del objetivo de la política cultural de seguridad y defensa, y la promoción de la conciencia de defensa nacional.»
Según informa el medio digital eldiario.es, el ministerio lo ha dicho en respuesta a una pregunta en su portal de transparencia, defendiendo que sigue los principios establecidos en la Ley de Defensa Nacional.
Ha precisado, sin embargo, que los militares no pueden ser forzados a participar, deben hacerlo voluntariamente, y los gastos que comporte la participación los debe pagar la entidad que les haya invitado.
En la respuesta el ministerio también detalló que en las procesiones de Semana Santa de este año participaron más de 400 militares, y añadió que esto ayuda a mejorar la imagen del ejército.
