El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha viajado hoy miércoles a Turquía para abordar la creación de corredores marítimos en el Mar Negro que garanticen la salida del cereal de Ucrania.
Rusia ha abierto la puerta para que el cereal ucraniano pueda salir desde los puertos y el ministro ruso Lavrov ha asegurado que su país está dispuesto a dar garantías formales de que no atacará los puertos. Kiev, por su parte, deberá desminar estos lugares para poder exportar el cereal.
Según ha señalado El Periódico, «Kiev ha sembrado sus aguas de minas acuáticas para evitar una invasión naval rusa y ahora no acaba de fiarse de Moscú«.
«Estamos dispuestos a formalizar las garantías de una forma u otra» ha afirmado Lavrov en una rueda de prensa conjunta que ha dado junto al ministro de exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, en Ankara.
Turquía, por su parte, se ha ofrecido a implementar un plan internacional que se acuerde entre Moscú, Kiev y Naciones Unidas para permitir las exportaciones seguras del cereal ucraniano.
Aparte del desminado de los puertos ucranianos, también se debe atender a las condiciones de Rusia, subrayó Çavusoglu. «(En Occidente) dicen que no hay embargo a los productos agrícolas rusos, pero esto no es suficiente. La seguridad de los barcos y el sector bancario tiene que quedar claro en ese mecanismo», señaló el ministro turco.
«Si no se limpia la zona de minas, los corredores de trigo y cereales no podrán ocurrir. Y ya hay una crisis alimenticia global. En las semanas anteriores estuve en América Latina y la preocupación es muy grande. Por eso se tiene que levantar el veto al trigo ucraniano y llegar a una conclusión que sea beneficiosa para todos […]. Vemos legítimo que Ucrania quiera exportar harina y trigo, como también vemos legítimo que con ello sean levantadas las sanciones contra Rusia en estos productos», ha añadido Çavusoglu.
«Queremos establecer un mecanismo junto con la ONU para superar estos obstáculos y cooperar. Creemos que llegar a un acuerdo razonable y aceptable por las dos partes será posible», ha dicho el ministro de Exteriores de Turquía, Mevlüt Çavusoglu.
«Rusia ha hecho su parte, y cada día abrimos corredores para que los cargueros ucranianos pasen. Estamos listos para proveer seguridad a los barcos ucranianos, juntamente con nuestros compañeros turcos. Pero [el presidente ucraniano, Volodímir] Zelenski, parece no estar por la labor. No parece estar dispuesto a superar el problema. La pelota está en su lado«, ha subrayado Lavrov.
«Los esfuerzos de nuestros amigos turcos son muy importantes, y están intentando conseguir que los barcos ucranianos puedan salir de puerto. En los medios occidentales se muestra como si estos cargueros y sus tripulaciones fuesen nuestros prisioneros. No es así; constantemente abrimos corredores para que salgan», ha añadido el ministro ruso Lavrov.
Ankara se ha ofrecido, a petición de Naciones Unidas, a escoltar a los barcos mercantes que transporten los alimentos desde la costa ucraniana, para lo que primero se debería proceder al desminado de los puertos.
También se ha abordado la actuación de Turquía en Siria
En el encuentro, los ministros han abordado también la situación en Siria, donde Turquía ha anunciado que podría producirse una operación militar inminente por parte del ejército turco ante posibles actuaciones de los grupos kurdos.
Ante tal escenario, Rusia ha afirmado entender «perfectamente las preocupaciones» de sus «amigos turcos sobre la amenaza que reciben en su frontera sur. Por desgracia, los Estados Unidos alimentan este tipo de organizaciones terroristas (el PKK). Sabemos de la situación y seguimos colaborando en este asunto».
«Nuestro objetivo es salvar a la gente de los neonazis»
Durante la rueda de prensa, un periodista ucraniano ha preguntado a Lavrov qué más ha robado Rusia a Ucrania aparte del trigo.
La respuesta de Lavrov ha sido directa: «No. Nuestro objetivo es claro: salvar a la gente de los neonazis. Queremos emancipar a los rusos y a los ucranianos del régimen neonazi. No hemos hecho nada de lo que comenta ni ponemos obstáculos a que salga el trigo ucraniano».