Continúan las sentencias españolas con represión judicial. Un joven vecino de Barcelona ha sido condenado por las protestas contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél en febrero del año pasado.
La Audiencia de Barcelona le ha condenado a cinco años de cárcel porque considera probado que el acusado movió contenedores y arrojó piedras a los Mossos durante una manifestación que comenzó en los jardines de Gràcia.
El joven se llama William Aitken y está encarcelado desde febrero 2021. Entonces no se le concedió la libertad provisional con el argumento de que el Reino Unido es un país fuera de la Unión Europea desde el Brexit y había riesgo de fuga.
El tribunal da credibilidad al testimonio de dos agentes de los Mossos y condena al joven por los delitos de altercados y atentado contra la autoridad con el agravamiento de instrumento peligroso. El joven le detuvieron en la segunda noche de incidentes por las protestas junto a una treintena de personas más.