Muchos son los analistas financiero-económicos de alrededor del mundo que señalan la llegada de una nueva crisis económica de nivel global. Ahora Bill Gates se ha unido a este grupo para augurar una nueva crisis económica global. El presente tiene una pinta regular, pero el futuro la verdad es que luce directamente mal.
La Covid-19, el durísimo golpe económico y en vidas humanas que ha supuesto la invasión de Ucrania por parte de Rusia en febrero de este año y la brutal inflación que azota al mundo son pruebas que invariablemente arrojan una realidad lacerante para las clases más bajas.
Así, los bienes de consumo son cada vez más caros mientras que la economía de los hogares está más depauperada y la crisis podría llegar a catalizarse en el momento en el que la inflación obligue a aumentar los tipos de interés.
Estas son las palabras Gates sobre el futuro: «Es probable que acelere los problemas inflacionistas que tienen las economías del mundo rico, y que fuerce un aumento de los tipos de interés que acabe provocando una desaceleración económica» argumentaba el genio de la informática, con la que muchos asienten.
