El presidente de Bielorrusia, Aleksandr Lukashenko ha insistido esta mañana en lanzar un mensaje a los países europeos: si las potencias occidentales respaldan un acuerdo pacífico en Ucrania, las hostilidades entre las fuerzas de Moscú y de Kiev podrían terminar en cuestión de días.
Desde la presidencia de Bielorrusia se considera que la lucha entre los pueblos hermanos de Ucrania y Rusia es una «gran tragedia». «Este conflicto es consecuencia directa de las intrigas estratégicas y de la mayor estupidez, desplegada principalmente por los políticos occidentales» ha señalado Lukashenko.
Ha subrayado que, sobre todo, es cuestión de los aliados occidentales, que tienen que estar realmente convencidos de querer lograr la paz. Porque de ser así, no hay duda, según el presidente de Bielorrusia, de que el conflicto se acabará en unos días.