La Assemblea Nacional Catalana (ANC) ha iniciado este sábado una acampada en Barcelona asegurando que la única «solución» a la represión desde el Estado español, «es la independencia». En una intervención ante activistas de la entidad, su presidenta, Dolors Feliu, ha aseverado que la justicia española «no da miedo» al soberanismo. “Estamos aquí más decididos que nunca sabiendo que existe una solución a la represión, sólo una, ¿cuál es? La independencia”, ha clamado. Por otra parte, afirmó que el independentismo no bajará los brazos. Este mediodía también se ha hecho lectura de un manifiesto en el que se denuncia la «catalanofobia análoga al antisemitismo» de la Francia del XIX que, según la ANC, caracteriza a los tribunales españoles.
El objetivo de la Assemblea es mantener hasta el dia de hoy domingo la acampada de Plaza Catalunya, que sumaba una veintena de tiendas a principios del sábado. La puesta en marcha de esta acción de protesta se ha hecho coincidiendo con el aniversario de la detención de los dirigentes independentistas Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, encarcelados en el 2017 por su participación en el referendo del 1-O.
Durante las próximas horas, la Asamblea ha organizado varios actos y charlas en el mismo emplazamiento donde hace once años se erigió también la acampada del 15-M en Barcelona. En esta ocasión, sin embargo, el campamento no cuenta con zonas comunes y la zona se limita a un grupo de tiendas desmontables delimitadas por una valla.
El acto de arranque de este sábado ha estado marcado por la lectura de un extenso manifiesto con el que la ANC busca «acusar» a la justicia española de no tratar el independentismo con imparcialidad, sino con afán represor. El texto, leído por un grupo de actores del grupo ‘R de República’ acusa al Estado y al rey Felipe VI de organizar una «causa general contra el independentismo». «Una persecución vehiculada en forma de procesos penales y otras actuaciones», apunta el manifiesto.
El objetivo de la ANC es presionar a los partidos independentistas para que pongan en marcha una comisión de investigación en el Parlament centrada en analizar precisamente los efectos de la “represión” en el movimiento soberanista. En caso de que no salga adelante, ha avisado hoy la entidad, activarán lo que han denominado una «comisión ciudadana» dedicada a esclarecer asuntos como las acusaciones a los CDR o las detenciones de activistas.
En este sentido, Feliu ha apostado por no olvidar a los “mártires”. «Estamos aquí porque no tenemos miedo y estamos con nuestros represaliados», ha añadido. Por otra parte, decide acompañar «a los que luchan» y ha alertado de que cada «represaliado» representa al independentismo en su conjunto.