El juez de instrucción número 29 de Barcelona, Santiago García, imputa al exlíder del PP Pablo Casado por un delito de injurias en relación a los bulos que lanzó sobre la escuela catalana a finales del año pasado a raíz del caso de la familia de una alumna de Canet de Mar (Barcelona) a la que la Justicia concedió el 25% de castellano en clase.
El que fue jefe de la oposición afirmó que a los niños que hablan castellano en el colegio no se les permite ir al baño. El titular del juzgado de la capital condal ha admitido la querella y ha ordenado que se tome declaración a Casado por un delito de injurias.
Los hechos se remontan a la decisión judicial de imponer el 25% de castellano a toda un aula a petición de una sola familia de Canet, que desembocó en una campaña de la derecha y la extrema derecha contra la inmersión lingüística en catalán.
En este contexto, Casado alimentó los bulos sobre la escuela en catalán al asegurar en un acto político que se prohíbe ir al baño a los menores que hablan castellano. “¿Se puede tolerar que haya profesores con instrucciones de no dejar ir a niños al baño porque hablen castellano? ¿Se puede tolerar que a niños se les metiera piedras en la mochila porque en el recreo hablaban castellano?”, se preguntó Casado…