La Fiscalía de la Unión Europea ha decidido archivar la investigación contra el empresario y exdirigente de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), David Madí, por presunto desvío de fondos de la propia UE. En el mismo expediente se investigaba el también empresario Joan Ferran. En el marco de la Operación Volhov se grabó una conversación telefónica de Madí en la que decía que en un acto de Fomento había hablado con Iván Redondo, entonces mano derecha de Pedro Sánchez, sobre el reparto de dinero proveniente de los Fondos Next Generation.
El juez del caso Volhov pidió remitir la conversación a la Fiscalía europea, que le ha archivado al no encontrar indicios de obtención ilícita de subvenciones del ex número dos de Artur Mas. En el texto del archivo de las investigaciones la Fiscalía constata que Madí y Ferran mantuvieron una conversación telefónica en la que el primero explicaba al segundo que Redondo le había explicado cómo presentar proyectos para captar fondos europeos.
El encuentro entre Madí y Redondo habría tenido lugar en un acto de Foment del Treball. El pasado marzo, cuando la Fiscalía europea pidió al juez del caso Volhov que le remitiera la conversación, la patronal precisó que a la reunión a que se refería Madí asistieron cerca de 60 empresarios y que Redondo participó para videoconferencia.
La conversación «evidencia», según la Fiscalía, que Madí tiene contactos o relaciones privadas «de las que se sirve en el desarrollo de su actividad profesional», pero más allá de eso, y «agotadas las vías de investigación posibles» , cree que «no es posible determinar ni la identidad de los contactos ni si en el desarrollo de su actividad de asesoramiento se sirvió de estos contactos para la obtención o utilización indebida de subvenciones europeas».