El presidente de Ucrania, Zelenskiy, ha afirmado que la corrupción es cosa del pasado en Ucrania y que todas las influencias rusas han sido expulsadas del país. Así lo aseveró en su participación en una conferencia organizada por el Foro de Nueva Economía de Bloomberg el pasado jueves.
No aportó datos ni evidencias sobre sus afirmaciones, a pesar de que el año pasado Ucrania figuraba como el segundo país más corrupto de Europa según el Indice de Percepción de Corrupción y Transparencia Internacional.
Medios internacionales como The Guardian ubican a Ucrania entre los países más corruptos del mundo (antes de la invasión de Rusia).
«Nadie podrá perdonar la corrupción en la futura Ucrania», señaló su presidente. Y lo argumentó señalando que todos los corruptos se han marchado huyendo del país durante los últimos meses.
El problema de la corrupción en Ucrania es uno de los factores que se tienen muy en cuenta a la hora de valorar su entrada en la Unión. Zelenskiy es conocedor del camino a recorrer si quiere que el país pueda ser considerado dentro de los estándares exigidos para poder acceder a la Unión Europea.
Durante su conferencia también afirmó haberse reunido con el vicepresidente del Banco Mundial, para abordar un proyecto piloto en el que se desarrollarán seguros para invertir en Ucrania en su proceso de reconstrucción.