La Audiencia de Barcelona condena a 3 años de cárcel a uno de los participantes en la manifestación contra la sentencia del Procés convocada por Tsunami Democrátic durante el partido del Barça-Madrid del 18 de diciembre de 2019. La sentencia de la Audiencia de Barcelona considera probado que el hombre lanzó una botella de cristal y una piedra en la línea policial, así como que agredió a los agentes que le detuvieron por los lanzamientos.
La defensa del condenado, sin embargo, sostiene que el tribunal sólo ha valorado la versión «interesada» de los hechos que han dado los Mossos d’Esquadra, a la vez que denuncia la falta de pruebas. El equipo defensor ya ha anunciado un recurso de apelación «contra la inconsistencia de las versiones acusatoria y la ausencia de pruebas».
El relato de los hechos supuestamente probados explica que el pasado 18 de diciembre del 2019, sobre las 20 horas de la tarde, el acusado se encontraba en la Travessera de les Corts, esquina con la calle Maternitat, formando parte de la concentración convocada por Tsunami Democrático. La concentración de Tsunami coincidía con una concentración de los grupos más radicales de aficionados en el Barça, y durante el recorrido para acceder al estadio, parte de estos seguidores radicales coincidió con un grupo de unas 300 personas que habían participado en acto de Tsunami Democrátic.
Los Mossos d’Esquadra se interpusieron entonces entre ambos grupos, de signo contrario según la sentencia. El texto relata que desde el grupo de Tsunami Democrátic se empezó a lanzar piedras, botellas de vidrio y adoquines contra los agentes que separaban al grupo radical del de protestantes. La sentencia identifica al condenado dentro de este grupo.
La defensa del condenado, sin embargo, denuncia que los hechos que la sentencia considera probados se basan «exclusivamente» en las declaraciones de los tres agentes implicados, «sin otra prueba», y califica a estos testigos de «parciales e interesados». Asimismo subraya que en ningún momento del periplo judicial han «aparecido» los objetos que «presuntamente se lanzaron contra la policía».
A su vez, también destaca que la sentencia condena al presunto responsable de los lanzamientos «pese a no poder asegurar que impactaran contra ninguna policía», y advierte de la «grave circunstancia» que supone el hecho de que el tribunal haya impuesto una pena «superior a la pedida” por la fiscalía, “acogiendo la modificación hecha a juicio por la acusación particular”, en representación de los Mossos, “que eleva de 1 a 3 años la petición de prisión”. Por todo ello, la defensa anuncia un recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.