El presidente francés, Emmanuel Macron ha vuelto poner sobre la mesa la necesidad de poner en marcha medidas de negociación para la paz entre Rusia y Ucrania.
Desde el pasado verano, el dirigente francés rompió el hielo apostando por una resolución del conflicto mediante el diálogo y la negociación diplomática. En su momento, la primera vez que se posicionó en este sentido, hizo hincapié en que no estaba dejando de lado a Ucrania, pues mantenía la defensa de su soberanía y su libertad. Sin embargo, subrayó que era fundamental tener claro que este conflicto solamente se resolvería por la vía de la negociación, y que más pronto que tarde, sería importante abordarlo para evitar más daños.
Ayer volvió a insistir: «El día de la paz implicará debates. En primer lugar, por las garantías a Ucrania, por su integridad territorial, su seguridad a largo plazo. Pero también para Rusia, como parte que será de un armisticio y un tratado de paz». Así lo afirmó ayer, en una entrevista que fue transmitida en los canales TF1 y LCI.
Aunque el mensaje viene a ser el mismo que ha dado el presidente francés desde el pasado verano, en la entrevista publicada ayer se ponía sobre la mesa un nuevo concepto: «garantías de seguridad para Rusia». Algo que hasta ahora no se había mencionado. Señalaba el dirigente francés que uno de los puntos esenciales que la OTAN debe asumir es la preocupación de Rusia, de que el bloque militar «llegue hasta sus puertas y se desplieguen armas que puedan amenazarla».
Críticas a sus comentarios
Las palabras del presidente francés han ocasionado un gran revuelo. Sobre todo en Ucrania, donde desde Kiev parecen haberse molestado. Otros líderes de la UE como en Polonia, Eslovaquia y en los estados bálticos, se han sorprendido también.
Desde el cuerpo diplomático francés han insistido en que las palabras de Macron han sido sacadas de contexto. Sin embargo, el propio presidente ha sido contundente y les ha respondido señalando que no es momento de crear controversias donde no las hay.
«Lo que propone la gente que se niega a preparar esto y a trabajar en ello es una guerra total. Una guerra que involucrará a todo el continente», ha afirmado el presidente.