El candidato republicano a la presidencia del Congreso de Estados Unidos, Kevin McCarthy, no ha logrado salir escogido en primera, segunda y hasta una tercera votación por la oposición de algunos miembros de su partido.
En la constitución del ciento decimoctavo Congreso, McCarthy necesitaba 218 votos para ser elegido «speaker» de la cámara, y sólo ha conseguido 203. Ante esta situación, la cámara ha decidido aplazar a este miércoles la votación para escoger a su nuevo presidente, que debe sustituir al actual, la demócrata Nancy Pelosi.
Para los observadores, los EEUU están teniendo problemas con su democracia. Es la primera vez en cien años que se da este escenario: en 1923, el presidente no fue escogido hasta la novena votación.
Bloqueo de trumpistas
La oposición a McCarthy ha surgido de las mismas filas republicanas, agrupada en el llamado Freedom Caucus. Le han dado la espalda y han propuesto otro candidato: el ultraderechista Andy Bigg, que sólo ha obtenido diez votos.
Otros nueve congresistas republicanos no han votado por ninguno de los dos candidatos. En una comparecencia en los medios, estos republicanos díscolos han reprochado a McCarthy que les pidiera su «sumisión» sin condiciones. En respuesta, el candidato republicano les espetó que piensan más «en sus cargos que en el país».
En los últimos días, McCarthy había estado negociando su apoyo, a cambio de modificaciones legislativas y de nombramientos en los comités de la Cámara. Una maniobra para satisfacer al ala ‘trumpista’ del Partido Republicano, con mayoría en la cámara baja.