Tal como indicábamos desde Las Repúblicas, con el asalto a tres edificios institucionales de Brasil como son el Congreso, el Tribunal Supremo de Brasil, y el Palau de Planalto sede de la presidencia, pidiendo un golpe militar por parte de cientos de partidarios de Jair Bolsonaro, este lunes las reacciones de los líderes políticos españoles han llenado las redes.
La gran mayoría han mostrado su apoyo a Lula da Silva, actual presidente, ya la democracia en general. Pero éste no ha sido el caso de Inés Arrimadas, líder del partido casi extinto Ciudadanos, quien ha optado por hacer una lectura muy distinta a los hechos.
En vez de enviar un mensaje que condenara el asalto, ha aprovechado la delicadeza de la situación para hacer una desagradable comparación entre lo ocurrido en las instituciones de Brasil y lo ocurrido en el Parlament de Catalunya en el 2018, cuando la ciudadanía intentó irrumpir allí hace cinco años.
Redes:
En España tenemos ejemplos de totalitarios que asaltan instituciones democráticas. Así tuvimos que salir hace pocos años del Parlament ante la turba separatista, alentada por los que hoy no sólo siguen en la Generalitat sino que son socios del Gobierno y redactan el Código Penal. pic.twitter.com/Xpe5zPb2dV
— Inés Arrimadas (@InesArrimadas) January 9, 2023
E igualmente el eurodiputado de Cs y vicepresidente del grupo parlamentario Renew Europe, Jorge Cañas, ha equiparado el asalto a las instituciones brasileñas de este domingo por parte de centenares de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro con los incidentes del Parlament en el primer aniversario del 1-O el 2018.
Pero sobre el proceso de refundación de Cs, margina a Arrimadas como presidenta. Solo quiere que mantenga su rol en el Congreso como portavoz. Incluso si la lista a la que apoya, liderada por Adrián Vázquez, pierde ante la propuesta del actual portavoz adjunto, Edmundo Bal: «No quiero poner a una Cuca Gamarra de turno, tenemos a una gran portavoz».
Sobre la ampliación del Aeropuerto de Barcelona, Cañas ha acusado a los contrarios a «sacrificar el crecimiento de Catalunya a cambio de controlar un operador», en referencia a Aena, y de querer controlar el dinero público y ha instado al Gobierno ha impulsar el proyecto. «Si la Generalitat no quiere que se amplíe El Prat, yo soy el Gobierno de España y digo: ¡Pero cómo que no, mañana mismo!«, ha zanjado.