Iniciativa del Europarlamento. La presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, ha trasladado al pleno la solicitud de las autoridades judiciales belgas para levantar la inmunidad al eurodiputado belga Marc Tarabella y el italiano Andrea Cozzolino por su supuesta implicación en el caso de sobornos de Qatar y Marruecos, el conocido y llamado como ‘Qatargate’.
Paralelamente, la institución también comienza el proceso para retirar, a petición de la fiscalía europea, la protección parlamentaria a las eurodiputadas griegas Maria Spyraki y Eva Kaili. Pese a que Kaili se encuentra en prisión preventiva e imputada por el Qatargate, la petición de levantarle la inmunidad, como en el caso de Spyraki, está relacionada con supuestos fraudes en el dinero asignado, concretamente la remuneración de los asistentes.
«Esto es el inicio, no el final», ha advertido Metsola, asegurando que emprenderán medidas para evitar posibles nuevos casos de corrupción en la Eurocámara. Más control sobre las puertas giratorias, declaraciones de intereses financieros de los eurodiputados y mayor atención sobre los encuentros con representantes de terceros países, son algunas de las propuestas.
El escándalo de sobornos a altos cargos del Parlamento Europeo para que tomaran decisiones favorables no se limita solo a Qatar y Marruecos. Las investigaciones e interrogatorios a los detenidos por esta trama han revelado, según explicó el medio belga Le Soir, que hay un tercer país implicado: Mauritania.
