España ha perdido diferentes juicios con órganos judiciales internacionales, por ejemplo, con inversores en energía verde que apostaron su dinero por España, animados las primas a las renovables que había aprobado en 2007 el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Todo fue un paripé y España y su establiment político no podia permitir dejar de beneficiarse de sus puertas giratorias. Así que las primas que se cortaron de raíz en 2013, con Mariano Rajoy al mando, y las inversiones de aquellas firmas internacionales perdieron valor de forma instantánea. Según indica Vozpopuli, estas empresas y fondos llegaron a reclamar a España cerca de 10.000 millones de euros.
Los entendidos de estas controversias internacionales son rotundos comparándolo con el avión de la expresidenta de Argentina Cristina presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, que tuvo que cambiar de avión en Rabat en su viaje a Roma para el pontificado del Papa Francisco por una amenaza de embargo si pisaba Europa.
Ironizan con que «esto podría pasar con el Falcon y el Reino de España, pero, atención, cada vez hay que tomarlo más en serio». Así el avión más icónico y mediático del presidente del Gobierno español podría correr peligro pues ya hay varias energéticas y fondos que presionan desde hace años a España.
Como publicaba ese medio, España es el país más moroso en el pago de arbitrajes tras Venezuela. Acumula un total de ocho laudos -resolución dictada por algún órgano arbitral en algún conflicto internacional- impagados con un valor total de 700 millones. Pues los tribunales internacionales de arbitrajes han condenado a España en ocho ocasiones.
Así que el reino de España está en el podium de los top morosos en segunda posición. Venezuela, por su parte, ocupa el primer lugar con 11 laudos impagados por valor de 7.168 millones de dólares y, para cerrar a los medallistas, aparece Rusia con 6 procesos pendientes con inversores con un saldo de 55.132 millones de euros.
