Nuevamente el PP vuelve a estar investigado, aunque ahora le ha tocado al europeo. Las policías belga y alemana registraron este martes la sede del Partido Popular Europeo (PPE) en Bruselas en relación a una investigación por corrupción iniciada en Alemania, en concreto en el estado alemán de Turingia, donde los agentes se han incautado de varios ordenadores.
Ha sido el propio PPE el que ha informado del registro a través de un comunicado. El PPE asegura que está «cooperando con total transparencia» con las autoridades alemanas y belgas.
«El partido está cooperando en plena transparencia con las autoridades involucradas, aportando toda la información relevante y documentación. Al tratarse de una investigación judicial en curso, el PPE no hará más comentarios», señaló el partido comunitario.
Fuentes del PPE también aseguran que la investigación es acerca de un asunto sobre un contratista que trabajó para el PPE durante la campaña para las elecciones europeas de 2019 y uno de sus subcontratistas en Alemania.