Escándalo, corrupción e indignación, son las palabras que más se repiten en torno a la Fira -Feria- de Barcelona en las últimas horas. La nula democracia que padece Catalunya la sufre el catalanismo, como es habitual, esta vez en primera persona.
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La falta de acuerdo entre la Generalitat, los ayuntamientos de Barcelona y Hospitalet de Llobregat y la Cámara de Comercio de Barcelona ha impedido por ahora el nombramiento a la vicepresidenta de Procore, Anna Navarro Schlegel, como miembro del consejo de administración de Fira de Barcelona, según han confirmado fuentes cercanas. A finales de enero, la Cámara propuso la empresaria olotina residente en EEUU debía incorporarse al consejo de administración de Fira de Barcelona junto con la vicepresidenta ejecutiva del departamento de recursos humanos de Seat, Laura Carnicero. En este caso, la directiva de Seat ha obtenido los apoyos necesarios y por el momento ocupará una de las dos vacantes que dejan Kim Faura y Pedro Fontana, con el mandato agotado.
La tercera teniente de alcaldía de Barcelona, Laia Bonet, y la alcaldesa de L’Hospitalet, Núria Marín, ambas miembros del PSC vetan a una mujer preparada, por ser independentista
Según han indicado fuentes de la Cámara de Comercio de Barcelona a la Agencia Catalana de Noticias (ACN), sólo se ha pospuesto el nombramiento hasta una próxima reunión del consejo de administración, donde el nombramiento de Navarro podría ver luz verde. Las fuentes consultadas informan de que se han abstenido en la votación la tercera teniente de alcaldía de Barcelona, Laia Bonet, y la alcaldesa de Hospitalet, Núria Marín, ambas miembros del PSC.
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La también presidenta de la Diputación de Barcelona ha optado por esta posición porque esta es una decisión que suele tomarse por unanimidad y no había sido «previamente informada» del nombramiento, añaden fuentes del Ayuntamiento de Hospitalet.
La empresaria, independentista sin miedo, debía ocupar una de las vacantes que dejan Kim Faura y Pedro Fontana, con el mandato agotado.
Navarro Schlegel es vicepresidenta de la empresa estadounidense Procore, dedicada a desarrollar software de gestión de la construcción. En 2020 fue nombrada como la mujer más influyente del mundo en tecnología, por la revista Analytics Insight, y en 2021 fue galardonada con la Cruz de Sant Jordi, por la Generalitat de Catalunya.
