El futuro presidente del País Valencià, Carlos Mazón, adelanta algunas de las primeras medidas que adoptará el gobierno de PP y Vox en materia educativa. En una entrevista en la COPE, detalló que piensan eliminar la Oficina de Derechos Lingüísticos (a la que se refirió como «Oficina de Policía Lingüística»), reforzar la inspección, «acabar con el proceso en la valenciana» en las aulas, garantizar la «libertad educativa» y «sacar la ideología de las aulas»:
«Una de las primeras cosas que debemos hacer de urgencia es acabar con la oficina de ‘Policía’ Lingüística, con todo un ejército de asesores lingüísticos nombrados a dedo por Compromís. El compromiso firme e irrenunciable es que haya libertad educativa en los colegios.» En este punto, Mazón se refirió a sus dos hijos de 15 años, de los que lamentó que «viven la realidad que viven» en el aula.
La Oficina de Derechos Lingüísticos la creó el gobierno de izquierdas en 2017 para velar por el cumplimiento y aplicación de la normativa legal sobre el uso de las lenguas oficiales en la Comunidad Valenciana y canalizar las quejas, sugerencias y consultas de la ciudadanía por discriminación lingüística. El PP y Vox han mantenido este miércoles la primera reunión para avanzar en el desarrollo del pacto de gobierno, en la que todavía no se ha hablado de la estructura del ejecutivo, si bien Mazón ha indicado que Educación y Sanidad son «clave para el PP.
En este sentido, el líder de los populares valencianos criticó que el requisito lingüístico haya llegado a la Sanidad, y que para consolidar una plaza de médico «valga lo mismo el valenciano que el doctorado»: «Nos hemos enterado, gracias a Puig i Compromís, de que las cataratas se operan en castellano o en valenciano, en vez de operarse bien o mal. Imagínese si debemos poner en marcha esta política de la libertad.»
