Da la sensación de que algunos aún no se ha enterado de que va esto. El régimen del 78 si lo tiene claro, pero el independentismo catalán no. El socialista Jaume Collboni ha sido elegido este sábado nuevo alcalde de Barcelona, gracias al apoyo in extremis de los sumisos Comuns y del PP, (a algunos no nos ha sorprendido) que han impedido así al candidato de Junts, Xavier Trias, hacerse con la vara de mando pese a haber sido el más votado en las elecciones del 28M y tener el aval de ERC. Collboni ha obtenido, en votación secreta, 23 votos -diez del PSC, nueve de BComú y cuatro del PP-, frente a los 16 de Trias -once de Junts y cinco de ERC- y los dos del candidato de la ultraderecha Vox, Gonzalo de Oro-Pulido.
En un Saló de Cent del Ayuntament de Barcelona repleto de líderes políticos catalanes -como Oriol Junqueras, Laura Borràs, Jordi Turull o Artur Mas-, se celebraba ayer la sesión constitutiva del nuevo consistorio barcelonés, marcado por un giro de guion en el último momento, – que no se lo creen ni ellos- ya que los comunes han anunciado una hora antes que apoyarían al socialista Jaume Collboni y tratarían de dejar en la oposición a Xavier Trias, de Junts, el candidato más votado.
El líder de Junts en el Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Trias, ha acusado al nuevo alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, y la hasta ahora alcaldesa, Ada Colau, de crear «un mal ambiente y un ambiente de enfrentamiento». “Ustedes se equivocan; hacen las cosas mal hechas y se equivocan absolutamente”, ha sentenciado durante su intervención en el pleno de investidura.
Trias ha visto cómo Collboni conseguía finalmente la alcaldía después de contar con los votos del PSC, comunes y el PP, mientras que su pacto con ERC para hacerlo alcalde no ha contado con suficientes apoyos. Al respecto, Trias ha lamentado que en la democracia «se gana y se pierde, y hay que saber ganar y perder con elegancia». «Y hay gente que no sabe perder con elegancia», ha recriminado.
El líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, ha criticado la situación que ha propiciado que este sábado fuera investido alcalde de la ciudad el cabeza de lista del PSC en las pasadas elecciones municipales, Jaume Collboni. «Hemos asistido al espectáculo del poder actuante, tomando decisiones, por encima de cualquier voluntad mayoritaria como la que había tomado esta ciudad», ha dicho después de la investidura de Collboni.
Es la segunda vez consecutiva que consigue la alcaldía la segunda fuerza en las elecciones, después de que en 2019 los votos de la lista del ex primer ministro francés Manuel Valls, sumados a los de BComú y el PSC, dieran la alcaldía a Ada Colau, en detrimento del candidato de ERC, Ernest Maragall, que había sido el más votado. Maragall, ha lamentado que se “vuelva a vivir un espectáculo indigno”.
Por su parte, en su discurso, Ada Colau ha justificado el golpe de timón como «una apuesta por el mal menor» que sirve para «enfrentar el modelo de Trias». «Lo hemos hecho sin entusiasmo», ha dicho, y ha añadido que son un «regalo envenenado» porque van directos a la oposición tras rechazar el pacto secreto de coalición que le ofreció Collboni con el PP. Ahora niegan ningún pacto de Estado con el Régimen del 78, pero a buen entendedor, con pocas palabras basta…