El Partido Popular es experto en las artes chanchulleras. Solo hay que ver la infinidad de tramas ocultas que han tenido a lo largo de su historia. Poner en duda la limpieza en el voto por correo en unas elecciones como las próximas del 23J, es la última, aunque no es una estrategia nueva, ni seguramente acabará aquí.
No solo la han llevado a cabo en la celebración de los comicios autonómicos y municipales del pasado 28 de mayo, en especial la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, sino también el propio presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que continúa insistiendo en las últimas horas en poner el foco en los carteros de Correos.
En dos ocasiones de lo que llevamos de campaña electoral les ha pedido trabajar «mañana, tarde y noche» con el objetivo de cerciorarse de que todos los sobres llegan a los cerca de 2,5 millones de españoles que han solicitado este servicio. Incluso con la promesa de pagarles las horas extra.
Estas palabras las ha lanzado este miércoles durante un mitin en Murcia pero también este mismo jueves en una entrevista con el inefable Federico Jiménez Losantos, en esRadio, a pesar de recibir infinidad de críticas por alimentar el fantasma del ‘pucherazo’ o de haber sido respondido con contundencia por la propia empresa pública. En esta ocasión, además, ha dejado en el aire la posibilidad de impugnar los resultados del 23 de julio.