Respuesta del Gobierno a la exposición de Puigdemont desde Bruselas, «nos separa un mundo y nuestras posiciones están en las antípodas». Así respondió la portavoz del gobierno español, Isabel Rodríguez, cuando le preguntaron tras el Consejo de Ministros si veía viable las condiciones que expuso Carles Puigdemont para negociar una eventual investidura de Pedro Sánchez.
Condiciones que pasan por una ley de amnistía previa y el compromiso de celebrar un referéndum de autodeterminación. Sin embargo, añadió: «Tenemos una herramienta, que es el diálogo; tenemos un marco, que es la Constitución; y tenemos un objetivo, que es la convivencia». Un modelo que, según ha defendido, «ha dado resultados»: «Nadie puede dudar de que la situación en Catalunya es infinitamente mejor a la de hace 5 años».
Un mensaje que ha reiterado Patxi López, portavoz del grupo socialista. «En los últimos años hemos recuperado la política para resolver los problemas políticos. Y con medidas políticas, algunas valientes, arriesgadas y muy criticadas, hemos conseguido que nadie dude que hoy la situación en Catalunya, en términos de convivencia, es infinitamente mejor que lo que heredó este gobierno», ha dicho.
Por su parte, Alberto Núñez-Feijóo cree que aceptar las condiciones de Junts es «aceptar que la España democrática no fue democrática en 2017». «Es inaceptable e imposible. Es un disparate histórico, atenta contra los derechos de los españoles y ni Pedro Sánchez debería ser capaz de llevarlo a cabo», aseveró.
Lo ha dicho después de reunirse con el líder de Vox, Santiago Abascal, en el Congreso, en el marco de la ronda de contactos que está haciendo el líder popular para intentar sumar apoyos para su investidura, que empezó la semana pasada con Sánchez.
